Mantén tu piel sana.

La piel es el órgano de mayor tamaño del cuerpo y forma parte de la sexta parte del peso. Tiene muchas funciones importantes, entre ellas, el bloqueo de ataques externos, regular la temperatura, absorbe rayos UV, sintetiza vitamina D y defiende de patógenos.

Hay una relación muy importante entre la piel y como comemos.

Lo que comemos día a día influye mucho en el cuidado de la piel, de hecho muchas deficiencias de vitaminas se reflejan en la piel, causando dermatitis, acné, psoriasis y resequedad, etc. Es por eso tan necesario prevenirlo con una alimentación adecuada, completa y saludable, rica en vitaminas.

Las vitaminas de la piel son las siguientes:

Vitamina A:

Contiene sustancias conocidas como retinoides y carotenoides, son los que de le dan los colores a las verduras y frutas, la encontraras en verduras y frutas rojas, naranjas y amarillos, así como productos de origen animal.

Estos compuestos disminuyen el efecto de los rayos UV en la piel y previenen de ciertas enfermedades dermatológicas como acné, psoriasis y cáncer de piel porque funcionan también como antioxidantes.

Vitamina C:

Cuando estamos expuestos al sol, los rayos UV causan estrés oxidativo que afecta directamente al ADN, generando especies reactivas de oxígeno que se relacionan con el envejecimiento y el cáncer de piel; aunado a esto el sol detiene la producción de colágeno y elastina, las cuales son proteínas que dan firmeza a la piel, causando así arrugas y flacidez en la piel.

Una de las funciones de la vitamina C es aumentar la síntesis de colágeno haciendo mas firme la piel, también funciona como antioxidante, repara y regenera las células y las protege de la oxidación que causa el sol, deteniendo el envejecimiento.

Otras de sus funciones también se encuentra la disminución de manchas por el sol, hidratación natural de la piel y regeneración de cicatrices.

Las fuentes de vitamina C son alimentos cítricos como coles de Bruselas, pimientos, fresas, moras, zarzamoras, limón, toronja, kiwi, piña, naranja y brócoli entre otras.

Vitamina D:

La vitamina D es sintetizada por los rayos del sol que atraviesan la piel y también tiene efectos directos en ella, regula la inmunidad y defiende de organismos malos que quieren atacarla, modula la inflamación y también alivia las heridas.

Las fuentes alimentarias de vitamina D son salmón, sardinas, atún, huevo, el sol y leche fortificada principalmente.

Vitamina E:

La vitamina E es el antioxidante favorito por excelencia, actúa evitando la radiación de los rayos solares en la piel y disminuye las arrugas porque mejora la secreción del colágeno.

Los alimentos ricos en vitamina E son las semillas de girasol y verduras de hoja verde como espinacas, espárragos, acelgas y pimientos.